Muchas mujeres reclamando frente al Congreso de la Nación Argentina

GÉNERO

Por Gabriela Chaparro (*)

El 25 de noviembre es el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, una instancia que propone visibilizar, reflexionar y erradicar todas las formas de violencia por razones de género.

Si bien hoy es un día reconocido mundialmente, su origen radica en nuestra América Latina y Caribeña puesto que la primera convocatoria al 25N la realizó el Movimiento Feminista Latinoamericano en 1981 en la ciudad de Bogotá. Durante este primer encuentro feminista de Latinoamérica y el Caribe se decidió tomar la fecha y asignarla como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, en memoria de las hermanas Mirabal, tres militantes dominicanas conocidas como “Las Mariposas”, quienes fueron torturadas y asesinadas brutalmente el 25 de noviembre de 1960 por la policía del entonces dictador Rafael Trujillo. Por eso, y transformando el dolor en potencia de lucha, para el movimiento popular y feminista Latinoamericano, las mariposas, son símbolo de resistencia.

La declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer, fue adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1993, dando cuenta del reconocimiento y la comprensión internacional de que la violencia contra las mujeres es una violación de los derechos humanos y una forma de discriminación contra el género.

De esta manera, el 25N representa una jornada de lucha y de reivindicación a las mujeres contra cualquier tipo de violencia ejercida hacia ellas. Durante este día, se invita a gobiernos, instituciones y organizaciones sociales, culturales, deportivas, políticas y la sociedad toda a desarrollar y convocar distintas actividades dirigidas a concientizar y sensibilizar sobre la problemática y reclamar políticas para la erradicación de las violencias.

En Argentina, contamos con herramientas fundamentales en la lucha contra las violencias como: la Ley 26.485/2009 de Protección Integral a las Mujeres para prevenir, sancionar y erradicar la violencia en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales. Actualmente esta Ley es aplicada en relación a las identidades sexo-genéricas disidentes debido a su situación desigual en el marco de una cultura cis-hétero patriarcal que pondera y legítima simbólica y materialmente la dominación masculina; o la Ley 27.499/2019, conocida como “Ley Micaela”, que establece la obligatoriedad de la capacitación en la temática de género y violencias contra las mujeres y disidencias para todas las personas que integran los tres poderes del Estado Nacional —Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
Pero, ¿Qué es lo que entendemos por violencia? De acuerdo con la Ley 26485, se entiende por violencia contra las mujeres toda conducta, por acción u omisión, basada en razones de género, que, de manera directa o indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, basada en una relación desigual de poder, afecte su vida, libertad, dignidad, integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, participación política, como así también su seguridad personal. Quedan comprendidas las perpetradas desde el Estado o por sus agentes.

El feminicidio/tranfemicidio es la expresión más extrema de las desigualdades que afectan los derechos humanos de las mujeres y disidencias. Sus registros demuestran cómo en tiempos de crisis las cifras se agravancomo se vio recientemente durante la pandemia de COVID-19 y también durante las crisis humanitarias, conflictos y desastres climáticos alrededor del mundo.

La Corte Suprema de Justicia de la Nación elabora un registro de datos estadísticos de las causas judiciales en las que se investigan muertes violentas de mujeres cis, trans y travestis por razones de género.
El concepto de femicidio del Registro Nacional de Femicidios de la Justicia Argentina (RNFJA) es el que proviene de la «Declaración sobre el Femicidio», aprobada en la Cuarta Reunión del Comité de Expertas/os (CEVI), celebrada el 15 de agosto de 2008:
«La muerte violenta de mujeres por razones de género, ya sea que tenga lugar dentro de la familia, unidad doméstica o en cualquier otra relación interpersonal; en la comunidad, por parte de cualquier persona, o que sea perpetrada o tolerada por el Estado y sus agentes, por acción u omisión».
En 2021 los datos estadísticos elaborados por el sistema judicial argentino registraron desde el 1° de enero al 31 de diciembre, doscientos cincuenta y un (251) femicidios y cinco (5) transfemicidios, evidenciando un (1) feminicidio cada treinta y ocho horas (38 hrs).

¿Cómo nos encuentra este 25N 2022? Desde el observatorio “Ahora Que Sí Nos Ven” dieron a conocer las alarmantes y frías cifras de femicidios y transfemicidios/travesticidiosregistrados entre el 1° de enero y el 23 de noviembre de 2022, elaboradas a partir del análisis de medios gráficos y digitales de todo el país.

La misma evidencio como resultado un (1) femicidio cada treinta y cuatro (34) horas en lo que va de 2022,ciento ochenta y ocho (188) intentos de femicidios y treinta y seis (36) intentos de femicidios vinculados; nueve (9) transfemicidios/travesticidios publicados en los medios de comunicación; cuarenta (40) habían realizado al menos una denuncia y veintisiete (27) tenían medidas de protección.

Estos datos no pueden leerse de manera aislada y solo como números o cuerpos violentados. Los femicidios y transfemicidios/travesticidios, no son otra cosa que crímenes de odio. Sobre nuestros cuerpos se inscribe, lo que para Rita Segato es “la pedagogía de la crueldad”, es el soporte privilegiado para escribir y emitir este mensaje violento y aleccionador que cuenta con la intensificación de la violencia mediática como “brazo ideológico de la estrategia de la crueldad”.

Desprecio hacia nuestras vidas, como parte de un contexto creciente de escaladas de violencias como vivenciamos a diario con cada grito ahogado exigiendo ser escuchadas ante el poder judicial patriarcal que minimiza la violencia o juzgan la vida de las mujeres para dejar impunes los actos de aquellos que se la arrebataron; o como en el intento de feminicidio político de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner como punto culmine de una serie de ataques contra su persona producto de la reacción conservadora que busca impulsar discursos anti derechos, pues poco tiene para ofrecer como proyecto de vida.

Sabemos que los femicidios y transfemicidios/travesticidios son expresión culmine de múltiples violencias que sistemáticamente se producen, de manera simultánea y se interrelacionan. Por eso, es necesario seguir hablando de interseccionalidad, porque no hay manera de pensar las profundas desigualdades que nos atraviesan y se traducen en violencias sin pensar múltiples categorías sociales como: clase, raza, etnia, género, sexualidad, ubicación geográfica, edad, etcs.

Por ello, conmemorando el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, es necesario visibilizar la desigualdad, la discriminación por razones de género y las violencias machistas, además de impulsar el fortalecimiento de las acciones por transformar las pautas sociales y los roles que subordinan a las mujeres y feminidades. Esto solo será posible mediante la profundización de la implementación de políticas públicas concretas frente a las sostenidas manifestaciones de la violencia por razones de género para prevenirlas y construir definitivamente una sociedad sin violencias.

Desde la Secretaria de Género de la FPyCS, se han impulsado iniciativas de sensibilización tendientes a la promoción de la desnaturalización de las violencias en todas sus formas.
Nuestras líneas de intervención implican el asesoramiento social, psicológico, jurídico-legal, e información, contención y acompañamiento en situaciones de violencia por motivos de género y diversidad sexual; derechos sexuales, reproductivos y no reproductivos; interrupción voluntaria del embarazo. Ley 27610 (ILE); gestión menstrual; salud sexual integral; salud mental; articulación con Universidad y organismos del Estado y la sociedad civil para garantizar intervenciones eficientes y no revictimizantes; el fomento de espacios de formación, capacitación y sensibilización con perspectiva de género, entre otros.

Para mayor información ingresa a @generofpycs en Instagram; para recibir asesoramiento y acompañamiento ante situaciones de violencia escribimos a secretaria.genero@perio.unlp.edu.ar o acercarte personalmente a la Secretaria de Género, que se encuentra ubicada en la oficina 34° – 3er. Piso- Edificio Néstor C. Kirchner.

Igualmente, si estas atravesando una situación de violencia, podes comunícate al 144, las 24 horas, los 365 días del año; si estas lastimada/e/o o necesitas asesoramiento acércate al hospital más cercano; y si necesitas denunciar, acércate a la comisaria de la mujer (calle 1 N° 523 e/42 y 43), o llama al 221-4231826. Importante: Todas las comisarias deben tomar las denuncias.

(*) Secretaria de Género de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social UNLP

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