La sucesión de barbijos, la pared, que tanto ha tenido de sostén, como de cobijo y de prisión, y el cartel que viene a sintetizarlo todo: No cuentes los días, haz que los días cuenten. La frase, de Mohamed Alí, se ofrece, desde la casualidad, como una hoja de ruta, como un recordatorio optimista, de la importancia del día a día. De todos y cada uno de ellos. Desde la irrupción de la cuarentena dura, en marzo del pasado año, el tiempo ha discurrido de manera caprichosa, alargando las horas y encadenando rutinas, ensanchando distancias y sumando días. Darle importancia a cada uno de esos días, construir desde ese tiempo, un espacio para encontrarnos y acercarnos, sigue siendo el desafío, en un mundo que ha cambiado acaso para siempre.

Villa Elisa, 23 de febrero de 2021.  

Alves, Esteban José. Estudiante de Fotoperiodismo FPyCS – UNLP

.

Dispositivo empleado: Celular Huawei, modelo Ale-L23

ISO: ISO-1410

Distancia Focal: 4 mm

Tiempo de exposición: 1/20 sec.

Balance de blanco: Automático

Zoom Digital:  1

Longitud focal de 35 mm: 27

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *