Page 5 - El derecho a la educación frente una encrucijada. Gladys Manccini - Sebastián Novominsky - Federico Rodrigo
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específicas como el aborto o los métodos anticonceptivos
y más generales como la salud sexual.
Estos dispositivos para atención de las problemáticas se en-
cuentran en permanente diálogo a fin de no perder la mira-
da compleja de cada situación particular. A su vez, si bien se
articulan fuertemente con las estrategias desarrolladas por el
equipo de tutorías para el primer año, también reciben con-
sultas de años superiores.
La segunda variable se vincula con cuestiones económicas:
imposibilidad de costear apuntes, transporte o mantener una
alimentación básica saludable. Por ello, la Facultad a través
del Centro de Estudiantes abrió y puso a disposición de los
estudiantes una línea de Becas de apuntes, de transpor-
te y de trabajo. Paralelamente, el Programa de Respal-
do a Estudiantes de Argentina (PROGRESAR), es una
política del Estado Nacional para los/as jóvenes que quieren
estudiar y la falta de recursos económicos se presenta como
obstáculo.
Finalmente el tercer elemento clave para el análisis y la defi-
nición de estrategias de trabajo se relaciona con las dinámicas
que se despliegan en el aula, lo que cada docente considera
que es la enseñanza, las estrategias didácticas, qué vínculos
se establecen; es decir cuestiones de orden pedagógico. En
ese sentido, las acciones se realizan no solo a través de los es-
pacios mencionados más arriba sino del armado y puesta en
funcionamiento del primer Programa de Formación Per-
manente, que desde la carrera de Profesorado de la Facul-
tad piensa y desarrolla estrategias para promover la reflexión
sobre las prácticas docentes. A través del mismo, se desarro-
llan jornadas de trabajo para profesores/as de primer año de
todas las carreras bajo el eje “ingreso con permanencia”. Con
esta acción buscamos, desde una mirada integral, acompañar
y sostener al/a estudiante para favorecer la concreción de sus
metas educativas.
Dicha tarea cobra sentido y realidad en una Facultad que deci-
dió poner al/la estudiante en el centro del proceso educativo,
lo que conlleva adquirir una práctica reflexiva constante. Sin
ella, todo esfuerzo del Estado Nacional o de las propias insti-
tuciones naufraga en el mar de las buenas intenciones.
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y más generales como la salud sexual.
Estos dispositivos para atención de las problemáticas se en-
cuentran en permanente diálogo a fin de no perder la mira-
da compleja de cada situación particular. A su vez, si bien se
articulan fuertemente con las estrategias desarrolladas por el
equipo de tutorías para el primer año, también reciben con-
sultas de años superiores.
La segunda variable se vincula con cuestiones económicas:
imposibilidad de costear apuntes, transporte o mantener una
alimentación básica saludable. Por ello, la Facultad a través
del Centro de Estudiantes abrió y puso a disposición de los
estudiantes una línea de Becas de apuntes, de transpor-
te y de trabajo. Paralelamente, el Programa de Respal-
do a Estudiantes de Argentina (PROGRESAR), es una
política del Estado Nacional para los/as jóvenes que quieren
estudiar y la falta de recursos económicos se presenta como
obstáculo.
Finalmente el tercer elemento clave para el análisis y la defi-
nición de estrategias de trabajo se relaciona con las dinámicas
que se despliegan en el aula, lo que cada docente considera
que es la enseñanza, las estrategias didácticas, qué vínculos
se establecen; es decir cuestiones de orden pedagógico. En
ese sentido, las acciones se realizan no solo a través de los es-
pacios mencionados más arriba sino del armado y puesta en
funcionamiento del primer Programa de Formación Per-
manente, que desde la carrera de Profesorado de la Facul-
tad piensa y desarrolla estrategias para promover la reflexión
sobre las prácticas docentes. A través del mismo, se desarro-
llan jornadas de trabajo para profesores/as de primer año de
todas las carreras bajo el eje “ingreso con permanencia”. Con
esta acción buscamos, desde una mirada integral, acompañar
y sostener al/a estudiante para favorecer la concreción de sus
metas educativas.
Dicha tarea cobra sentido y realidad en una Facultad que deci-
dió poner al/la estudiante en el centro del proceso educativo,
lo que conlleva adquirir una práctica reflexiva constante. Sin
ella, todo esfuerzo del Estado Nacional o de las propias insti-
tuciones naufraga en el mar de las buenas intenciones.
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