A partir de Ranciere y Virno: notas para problematizar qué puede ser hoy hacer una crítica de medios

Resumen

Sobre los medios se dice y se ha dicho mucho: que reflejan lo real; que no lo reflejan, sino que lo construyen. Que dicen qué pensar; que no dicen qué pensar sino en qué pensar. Que clausuran temas; que no clausuran temas sino que los jerarquizan según agendas. Que manipulan; que no manipulan sino que crean ambientes y climas. Que mienten; que no mienten sino que crean realidad simplificada, clichés, percepciones preformateadas. Que influyen en sujetos pasivos; que no tienen ninguna influencia porque los sujetos son activos. Que producen efectos inmediatos y medibles; que, en caso de que produzcan efectos, estos no son sino cognitivos, acumulativos, sedimentados en un largo alcance, impredecibles y de largo plazo. Que los medios involucran una relación directa entre instancias de emisión y de recepción; que la relación entre producción y reconocimiento (entre emisión y recepción, en clave veroniana) es asimétrica. Así, ¿habría algo más para decir? ¿Y sobre la crítica de medios? ¿Qué puede ser hoy una crítica de medios?, ¿por dónde podría pasar?, ¿por qué? El artículo propone desandar estos interrogantes a partir de algunos pasajes del pensamiento de Paolo Virno y Jacques Ranciere.