Clase Práctica 7

Al momento de pensar una Campaña de Comunicación de Políticas Públicas deben seguirse una serie de pasos hasta ver el/los producto/s finales de la campaña expuestos, sea en la vía pública, en medios gráficos y/o audiovisuales o en plataformas tecnológicas. De acuerdo a la estrategia considerada, una campaña debe ser pensada para que circule en diferentes espacios, teniendo en común el contenido del mensaje, pero apelando al lenguaje propio de cada una de estas herramientas comunicacionales.

En un plano aspiracional, la campaña debe ser pensada desde el inicio hasta el final. La planificación estratégica parte de una “situación inicial” y culmina en una “situación objetivo”, inserto este recorrido en la realidad palpable.

Todo punto de partida implica el reconocimiento del escenario en el que se va a desarrollar la campaña y los actores que en él intervienen. Para tal fin debe recolectarse la mayor cantidad de información posible para conocer con precisión el territorio en el cual va a tener lugar la campaña. Es decir, deberíamos contar con un mapa mental que nos permita contar de forma resumida dónde y de qué modo van a desarrollarse las acciones que conforman la Campaña.

El tema de la Campaña funciona como un gran organizador que nos permitirá tener un primer recorte sobre qué parte de la realidad nos interesa intervenir. A su vez, la investigación formativa nos exige conocer a fondo cómo está conformado el total de la población; cuáles son sus intereses principales; qué hitos o momentos destacados atravesó el lugar; cómo está organizado geográficamente; etc. Esta investigación requiere indagar en la información que ya está disponible, a través de noticias, informes, estadísticas oficiales y, también, apela a que generemos nuestra propia información una vez que ya tengamos esa primera delimitación del tema y la zona en la cuál realizaremos la campaña.

Desde ya que, a medida que avancemos con la Campaña notaremos que hay información prescindente o que ya no necesitaremos, pero para realizar esa selección es necesario primero contar con todo el material recabado; como en la edición de una nota, podemos decir que antes de enfocar la campaña debemos contar con todo el crudo de la información a fin de afinar lo que queremos decir y el modo en que lo diremos.

No es lo mismo pensar una campaña de comunicación en un barrio céntrico de una ciudad que en un barrio periférico; la identidad de cada barrio será distinta, tanto como las urgencias de cada sitio por más que estén atravesados por los mismos temas por compartir una organización geográfica (municipio) en común.

Dicho esto, desde las Ciencias Sociales se recurre a dos tipos de técnicas para obtener datos: técnicas cuantitativas y técnicas cualitativas. Las primeras, sirven para medir cantidades; las segundas, se emplean para examinar comportamientos. Entre las cuantitativas la más extendida y práctica para su empleo es la encuesta. Como ejemplo de técnica cualitativa, podemos mencionar las entrevistas en profundidad o el Focus Group.

Lo más importante al momento de pensar en la realización de una encuesta es dar cuenta de un recorrido que vaya de las respuesta más generales a las particulares de la temática que estemos interesados en indagar. La determinación de las respuestas debe estar en sintonía con aquellos datos que más nos interese recolectar a fin de planificar nuestra campaña. En ese momento también serán necesarias otras técnicas más ligadas a la antropología como la observación participante que nos permitirá dar cuenta y registrar la actividad y el quehacer de los actores del territorio al momento de hacer nuestra planificación.

El Focus Group es una herramienta que también resulta útil una vez que la Campaña fue lanzada a fin de comprobar empíricamente las reacciones y expresiones que genera en un grupo determinado de personas.

Junto a estos instrumentos de diagnóstico, nos parece importante destacar la Matriz FODA como elemento a usar en distintos momentos de la Campaña para medir el ambiente interno y el ambiente externo, a través de las Fortalezas y Debilidades y las Oportunidades y Amenazas que reconocemos al pensar y desarrollar las distintas acciones que configuran la campaña.

En el apunte encontrarán su explicación sumado al modo gráfico de representarla el cual simboliza una mirada integral de los desafíos que debe enfrentar el trabajo. Para ello, la Matriz debe hacerse con el mayor realismo posible. No es un instrumento de deseo sino un test sobre la situación real que sirve para saber dónde está parada la organización al momento de plasmar la Campaña y de qué modo esa Campaña corresponde a sus aspectos positivos (Fortalezas y Oportunidades) y responde a los aspectos negativos (Debilidades y Amenazas).

Por último, digamos que, a fin de seguir recortando el tema, la investigación formativa nos da un colchón sobre el cual podremos ir definiendo con mayor precisión el tema elegido y a qué población irá destinada la Campaña comunicacional. Como se emplea en Comunicación Política, ¿Cuáles serán los blancos elegidos? y ¡De qué modo elaboraremos los mensajes expresados en los productos visibles de la campaña?

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