Desde la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP manifestamos nuestro más enérgico repudio ante el conflicto gremial que están atravesando los trabajadores de canal 9, frente a la presentación de la empresa de un “procedimiento preventivo de crisis”, que permitiría “despedir trabajadores y precarizar a otros”.

Por otra parte, nos solidarizamos y acompañamos las medidas de fuerza adoptadas por los trabajadores de la señal C5N en su justo reclamo del cumplimiento del pago de salarios adeudados hace tiempo.

Consideramos que este contexto de devaluación, inflación, crecimiento de la pobreza, desempleo y pérdida de derechos laborales, no son ajenos a los medios de comunicación, que hace tiempo también vienen sufriendo un brutal ajuste. Cierres de medios, despidos indiscriminados, supuestos retiros voluntarios y una absoluta precarización laboral caracteriza a la comunicación de hoy.   

Cuando la Política de Comunicación son los despidos…

No sólo los medios privados se hallan sometidos a las consecuencias de las feroces medidas económicas ejecutadas por el gobierno del presidente Mauricio Macri. También los medios públicos vienen sufriendo estos despidos masivos, recorte presupuestario y  reducción de horas laborales. La agencia Télam, Radio Nacional, la TDA, Pakapaka, Encuentro, DeporTV y la TV Pública son algunos ejemplos del “desguace” en los medios públicos.

Frente a todo esto, consideramos que el gobierno nacional es el mayor responsable, no solo del avasallamiento de los derechos de los trabajadores, sino también, el responsable de velar por los derechos a la comunicación, a la libertad de expresión, a la información y la pluralidad de voces.