por Andrés López (*)
Pasaron los Juegos Panamericanos en Santiago de Chile, pasó la final de la Copa Libertadores en Río de Janeiro y esos dos eventos se robaron gran parte del último fin de semana. Y además cobran especial sentido en un día como hoy, porque es 7 de noviembre y en Argentina se festeja el Día del Periodista Deportivo.
Un puñado de canales tuvieron la exclusividad para difundir las imágenes, pero también hubo un gran número de periodistas de diferentes puntos del país que dijeron presente. Trabajando en grandes medios o haciéndolo por su cuenta, con sponsors privados o recursos propios, llevando siempre la pasión como bandera, el periodismo deportivo estuvo ahí para cumplir con el ABC de la profesión: hacerse presente en el lugar de los hechos para contar lo que ocurre.
Por televisión, por radio o por Internet, por la prensa escrita o por redes sociales, fueron cientos de periodistas que viajaron miles de kilómetros para ir detrás de las historias que siempre se generan en esos eventos. La emoción de una medalla, la previa de una competencia, la hinchada que llega a un país vecino, la familia que acompaña a sus atletas… Infinidad de detalles de los que solo es posible enterarse porque hay quienes hacen el esfuerzo de viajar para contarlo.
Tender puentes, unir caminos, estrechar lazos entre profesionales de distintas partes del mundo, eso siempre fue una marca del periodismo deportivo. Sin ir más lejos, el año próximo se va a cumplir un siglo de la fundación de AIPS, la Asociación Internacional de la Prensa Deportiva, creada durante los Juegos Olímpicos que se disputaron en 1924 en París.
Agruparse, unir fuerzas, establecer redes, potenciar esfuerzos, siempre fue una característica del periodismo especializado en deportes. Así se crearon círculos en diferentes puntos del país que se agrupan en la FAPED, la Federación Argentina de Periodistas Deportivos. Así se creó hace cinco años APREBA, la Asociación de Prensa de Básquet de Argentina. Y las diferentes entidades se reúnen periódicamente, organizando encuentros y espacios de capacitación. La apuesta siempre fue la de subir la vara, la de pensar en un horizonte mejor para la profesión.
Con ese espíritu es que la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata creó en 2009 la Tecnicatura Superior Universitaria en Periodismo Deportivo. Fue la primera vez en que la universidad pública le dio paso al periodismo deportivo como un nuevo campo de estudios. Y es la única carrera en su tipo que se puede estudiar en forma libre y gratuita en todo el país.
Como el periodismo deportivo, la Tecnicatura también se propuso recorrer caminos. Desde hace una década, también se puede cursar en la ex Esma, donde funciona una extensión áulica de la Facultad en la Casa de la Militancia de H.I.J.O.S. A través de diferentes convenios, la carrera se dictó en Formosa, en Balcarce, en Laprida, en Chivilcoy y en Gualeguaychú. Desde hace unos meses, se está dictando en el municipio de General Rodríguez. Y este año llegó a los barrios de La Plata, con las sedes barriales de Los Hornos y La Casita de los Pibes, en Villa Alba.
Y con el tiempo, además, construyó su propio espacio de intercambio con un Congreso de Periodismo Deportivo que este año tuvo su undécima edición. Y que cada vez más se transforma en un encuentro de diferentes generaciones. Hubo referentes como Alejandro Apo, Miguel “Tití” Fernández, Ariel Scher o Viviana Vila; profesionales de trayectoria como Juan Pablo Marrón, Sebastián Varela del Río, Natalia Maderna o Alfredo Montes de Oca; y jóvenes como Agustín Stella, Ariel Cheb, Florencia Andersen, Delfina Mónaco o Lautaro del Campo, “La Cobra”. Todo en tres jornadas con charlas, paneles, debates, entusiasmo y aulas llenas.
Los medios y saberes tradicionales siguen vigentes, pero es imprescindible hacer lugar al streaming, a las redes sociales, a nuevas formas de comunicar. El desafío de estos tiempos es recorrer el camino para pensar un periodismo deportivo superador, que se piense desde el Siglo XXI y para los tiempos que se vienen.
Este 7 de noviembre nos encuentra apostando por un periodismo deportivo más amplio y diverso, que ponga en valor los saberes de la juventud, las mujeres y las diversidades. Un periodismo deportivo que no sea machista, clasista ni sexista, que sea parte de un deporte y una sociedad mejor, y que nos ayude a construirla. Que valore el fervor del fútbol, pero también el esfuerzo silencioso de deportistas que están lejos de las luces en el día a día. Como hicieron quienes en estos días faltaron de sus hogares para dar testimonio de lo que ocurría en otras tierras. Como hacen cada día quienes se están formando ahora mismo en las aulas de la universidad.
(*) Director de la Tecnicatura Superior Universitaria en Periodismo Deportivo
