Con profunda tristeza y dolor despedimos a nuestra querida y entrañable Madre de Plaza de Mayo Norita Cortiñas y abrazamos fuerte a sus familiares. Su partida nos deja el ejemplo irrenunciable de la defensa de los derechos humanos y el inclaudicable compromiso por la Memoria, la verdad y la Justicia.

Su amoriosidad por les más vulnerables, su incansable resistencia ante las injsusticias y atropellos, su actitud batalladora para defender en cada rincón a quienes eran oprimides, son sus enseñanzas que se hicieron y harán carne en cada une de nosotres.

Norita, te fuiste con tus 94 años, te vamos a extrañar. Fuiste madre de Gustavo, estudiante de la facultad de Ciencias Económicas de la UBA y militante de la Juventud Peronista, secuestrado por los militares el 15 de abril de 1977, en la última dictadura cívico militar, hoy desapartecido, a quien nunca dejaste de buscar.

Vuela alto inmensa mujer a encontrarte con les 30 mil compañeres desaparecides!!!!