Por Zulema Enriquez*
Pasan los años y el pedido de justicia crece, y los dolores tienen más antigüedad pero también más profundidad. ¿Cómo se subsiste con la falta de una hija, de una hermana, de una compañera?
Emilia Uscamayta Curi tenía 28 años cuando murió el 1 de enero de 2016, ahogada en la pileta de una fiesta de fin de año, que no estaba autorizada pero se llevó adelante con coimas a funcionarios de la Municipalidad de La Plata, esto es consecuencia de los negociados de la noche platense y de la corrupción de los funcionarios públicos. Era una joven inquieta, viajera, comprometida con la realidad social, militante de los pueblos originarios, porque pertenecía a ellos, tenía muchos sueños por realizar como profesional, era estudiante de la Facultad de Periodismo y Comunicación de la UNLP.
La familia Uscamayta Curi, estandarte de lucha, cada año refleja su incansable pedido de justicia. Este año ha sido muy difícil y doloroso, en pandemia, con aislamiento social, sin muchas posibilidades del (físico) que cura aunque sea de a ratitos. Pero la fuerza de lo colectivo sigue intacta, el aislamiento no rompe lazos de hermandad, desde la Asamblea Justicia por Emilia, integrada por familiares, amigos/as/es, compañeros/as/es y la Facultad de Periodismo y Comunicación Social, se sigue pidiendo incansablemente justicia y denuncia a tanta impunidad, como el repudio inmediato que realizó ante los hechos ocurridos el 1 de diciembre pasado cuando en el programa “Bienvenidos a bordo” que conduce Guido Kaczka por Canal 13, hizo su aparición Raúl “El Peque” García, uno de los empresariosamigo de Juntos por el Cambio, que organizó la fiesta ilegal aquel 1 de enero de 2016 en Melchor Romero, evento que con aval mediante coimas de funcionarios públicos del municipio de Julio Garro, causó la muerte de nuestra compañera.
Impunidad, hipocresía y dolor, la vida para algunos como “El Peque” García, sigue igual, participando de concursos en programa de TV, buscando fama y farándula, la vida para otros/as/es se volvió llena de recuerdos de lo que dejo Emilia. La impunidad no solo es injusticia sino burla del poder a las/os/es más desprotegidos/as/es. Sin juicio y con mucha dilatación para ello hasta la fecha ninguno de los responsables (organizadores y funcionarios de Garro) tuvo algún castigo.
Otro año comienza sin Emilia pero acá estamos recordándote con las mismas convicciones del primer día, en recuerdo a lo que fuiste; lucha viva de mujer indígena, joven comprometida, hija de migrantes, militante de la patria grande, de nuestra AbyaYala, esa Latinoamérica morena, negra, mestiza que siempre luchó contra el poder del imperialismo, de la colonización.
Te recordamos en cada lucha que damos junto a tu familia, tus compañeros/as/es, tus profesores, tus amigos/as/es, tu facultad. ¡No callamos, justicia por Emilia!
*Directora de Pueblos Originarios “Emilia Uscamayta Curi” de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP.
