PRENSA

Por Cintia Bugin*

Durante algunos años trabajé de periodista, un día, no sé cómo, todos los jefes de redacción se dieron cuenta al mismo tiempo que podían arreglarse sin mí. Ahora escribo historietas absurdas sobre historias verdaderas. No me va mucho mejor, pero se conoce gente.

(Apertura programa El Otro lado, 1993)

En El Mes del Periodismo que nos propone la Facultad, en un contexto particular, donde la pandemia nos reúne de una modo diferente. Pensar el rol del/la periodista, reflexionar sobre las formas de comprenderlo en  los medios de  comunicación, problematizar los modos en que hoy se construye la figura del comunicador, nos lleva también a pensar quienes aportaron nuevas maneras de definir el periodismo, de relatar lo cotidiano pero invisibilizado, lo que está en los márgenes.

Quisiéramos recordar a quien ha descubierto un otro lado del periodismo televisivo, que ha sido un visitante de lo real invitando a los/as/es televidentes a compartir esos otros mundos.  Recordar a  Fabián Polosecki (“Polo”) es tener la convicción de que es posible repensar los modelos mediáticos tradicionales, reformular las formas del interactuar, del reportaje, del informe, de la ficción y la no ficción, estallando los tiempos y espacios televisivos, reconociendo los nuevos sujetos sociales, consciente de la politicidad de la imagen.

En sus programas, “El Otro lado” (1993 -1994) y  “El Visitante” (1995) se configuraron y dieron forma los modos de la memoria, de la narración de las historias de los sujetos, las innovaciones en el plano estético, de lo estilístico y lo narrativo irrumpiendo y dejando su huella en el periodismo de investigación audiovisual

El 19 de abril de 1993 se transmite la primera emisión de “El otro lado”, en el ATC de Gerardo Sofovich y conforma un nuevo espacio en la pantalla chica. Poesía, policial negro, cuento, historieta, géneros mezclados, híbridos, marginales en la televisión argentina. Se entrecruzan los lenguajes. Fotografías y historias cercanas, temáticas globales: el amor, la muerte, el deseo o el miedo. Ambientes marginados y personas que transitaban en la vereda opuesta al clima festivo de la frivolidad del momento. Su metodología fue escuchar al otro, resignificar el lugar de los silencios, de la pausa, la reflexión de lo escuchado, la conversación.

Seres invisibilizados se vuelven visibles, caras que no ocupaban lugares frente a las cámaras aparecen en primeros planos, gestualidades, texturas, paisajes, territorios olvidados irrumpen en la monotonía de la imagen menemista: trabajadores sexuales, buscadores de oro en las alcantarillas, punks, policías y ladrones, travestis, celebridades, pastores, tatuadores, maquinistas, bandas de rock (aun no tan conocida) ,“El surf de los pobres”, trabajadoras domésticas, gitanos, taxistas, custodios, guardia cárceles, cirujas.

Aparecen lugares no habitados por el periodismo televisivo: la ciudad, los bares, la calle, barrios populares, la calle Corrientes, atravesados por las músicas, los sonidos, el golpe de la teclas de la máquina de escribir, las voces, las bocinas, los silencios, imágenes de lugares no mirados, historias no contadas, la noche, el día, los márgenes, los otros lados. No hay espectacularización, la imagen no estigmatiza, no se construyen estereotipos. Todo confluye en una obra que se conformaba distinta a través de la mirada de Fabián Polosecki, conocimiento y reconocimiento del otro.

Fabián Polosecki nació en el barrio porteño de Belgrano en 1964. En su adolescencia militó en la Federación Juvenil Comunista en su adolescencia y fue un referente del movimiento estudiantil. Inició joven su oficio de periodista, trabajó en la revista “Radiolandia”, transitó por los diarios “Sur”, “Página 12” y “Popular”, las revistas “Fierro”, “El Tajo” y la revista “Teleclick”.

Ingresó en el mundo de la televisión con un micro en el programa Rebelde Sin Pausa de Roberto Pettinato. Luego, también en ATC surgió la oportunidad de tener su propio espacio, donde condujo los programas “El otro lado” y “El Visitante” por los cuales fue ganador de tres premios Martín Fierro. Un gran equipo conformó estos programas que fueron fundacionales en la televisión argentina: Pablo de Santis, Pablo Reyero, Ariel Barlaro, Agustín Salem, Marcelo Birmajer, Ricardo Ragendorfer, Ignacio Garasino, Daniel Laszlo, Diego Lublinsky, Irene Bais, Claudio Beiza, entre los principales miembros. Ya alejado de la televisión, el 3 de diciembre de 1996, Fabián se suicidó arrojándose bajo una formación ferroviaria en marcha, en la localidad de Santos Lugares.

Polo y su equipo buscaban “aventuras culturales”, distanciarse del periodismo espectacularizado de la época e iniciaron un nuevo modo de comprender la televisión, desde la emergencia de obras que dejan los “antiguos” modo de representación. Correlato de lo que también estaba pasando en el cine, con el surgimiento de jóvenes realizadores con films novedosos en su contenido y puesta en forma, generando una relación particular con el espectador, otras formas de visibilidad de la juventud y nuevos modos de politicidad alejadas de las viejas tradiciones.

Polosecki exploró los caminos de la estética y la comunicación con una característica esencial: el compromiso en la búsqueda de la verdad, en el sentido benjaminiano, no basada en impostadas denuncias periodística, la búsqueda feroz por el rating, sino en la indagación de verdad social y en la belleza de lo real. La política se hace presente en su obra, en la conciencia de la forma audiovisual, en la confianza en el valor y respeto del entrevistado/a y en la inteligencia del público, en la idea de encontrarse con del otro, apasionado por lo que ellas cuentan, escuchando sus relatos, indagando en los silencios. Cuando en una entrevista le preguntaron qué significaba la comunicación, respondió que comunicarse es sentarse a hablar con el corazón en la mano, tratar de encontrar alguna de las formas de la verdad.

Junto a Gustavo Alonso, director y productor platense, les compartimos el documental “La vereda de la sombra”, y proponemos visitar a Polo en sus propias historias, encontrando allí  las huellas de  un antes y un después del periodismo en la televisión argentina.

*Profesora de Análisis y Crítica de Medios de la Facultad de Periodismo Y Comunicación Social de la UNLP.

#ElMesDelPeriodismo

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